Recientemente, Turquía celebró unas elecciones presidenciales que podrían significar un cambio en la política interior y exterior turca, teniendo un impacto no sólo en este estado, sino en la OTAN, la UE y en Oriente Medio.
En 2017, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, salió victorioso en un referéndum. Tras este referendum, Turquía hizo una transición hacia un régimen presidencialista, se otorgó la capacidad de decidir a la mitad de miembros del Tribunal Constitucional y alargó de cuatro a cinco años el periodo presidencial, y un mayor autoritarismo del presidente.
El pasado 6 de febrero, se produjo un terremoto en el sureste de este estado, el cual dejó más de 50.000 mil muertes, millones de dólares en daños y un sinfín de críticas para el Gobierno por su gestión ante la emergencia. También hay que añadir, las dificultades económicas que afectan gravemente al país con inflación muy elevada y una devaluación permanente de la divisa turca han erosionado la popularidad del mandatario turco, Recep Tayip Erdogan.
Junto a ello, toda la oposición acordaron que Kemal Kilicdaroglu, el líder del CHP (Partido Republicano del Pueblo), el principal partido de la oposición, fuera el rival frente a una aparente debilidad electoral de Erdogan. La mayoría de las encuestas daban a Kilicdaroglu como ganador de los comicios. Sin embargo, contra pronóstico, el 28 de mayo, Erdogan logró la reelección con el 52% de los votos, frente al 48% de su contrincante. En este artículo, se arrojará más detalles sobre la victoria de Erdogan y cuál será el impacto de su reeleción.
Uno de los principales motivos de esta victoria, fue el nombramiento de Kilicdaroglu.
Por una parte, Erdogan empleó recursos estatales para atraer a los votantes con medidas como: gas doméstico gratuito, aumentos salariales, recortes fiscales y préstamos asequibles. También recurrió a una campaña dirigida a minorías como la comunidad LGBTQ y difundió imágenes trucadas que vinculaban a Kilicdaroglu con terroristas.
Kilicdaroglu cometió algunos errores importantes por el camino. Su equipo de campaña centró únicamente en estrategias de marketing y subestimó la importancia de la participación pública. Al mismo tiempo, optó por el populismo, haciendo promesas altisonantes como aumentar los salarios, prometer el acceso sin visado a la UE Europa para los ciudadanos turcos en un plazo de tres meses. Sin embargo, no fue capaz de dar respuestas claras en política económica sin poder convencer a los votantes en política económica.
Otro aspecto clave fue la alianza no oficial de Kilicdaroglu con el prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP). Según Ankara comparte vínculos ideológicos con grupos armados kurdos calificados de terroristas por Turquía. Erdogan aprovechó esta oportunidad incluso proyectó vídeos trucados de la campaña de Kilicdaroglu, provincia por provincia, en los que aparecían apoyos de dirigentes del PKK.
Junto a ello, la tercera clave ha sido la alianza con el candidato ultranacionalista, Sinan Ogan. Sinan Ogan quedó en tercer lugar en la primera vuelta de las elecciones presidenciales con el 5,2% de los votos. Ogan atrajo más de 3 millones de votos de personas que desaprobaban las políticas de Erdogan, pero que no querían apoyar a Kiliçdaroglu.
Esta alianza y apoyo de Ogan a Erdogan se produjo con 4 líneas rojas:
1- En primer lugar, los cuatro primeros artículos de la Constitución son intocables. Dicen que Turquía es un Estado democrático, secular, unitario, cuyo idioma oficial es el turco. Ogan defiende un Estado secular y votó en contra del actual sistema presidencialista en Turquía.
2- En segundo lugar, Ogan demanda que los sirios vuelvan a su país. En Turquía viven unos cuatro millones de desplazados sirios. Erdogan, por los acuerdos que mantiene con la Unión Europea, se opone a esta medida.
3- Ogan exige un giro de 180 grados en la política económica. La inflación interanual superó en abril el 100%, según organismos independientes, y el banco central turco ha bajado los tipos en lugar de subirlos. Mientras que, la lira se depreció un 80% en cinco años.
4- Ogan no quiere saber nada de los kurdos, ni moderados, ni del PKK, ya que, todos los considera terroristas.
En la primera vuelta, la oposición denunció un intento del Gobierno de bloquear el recuento y la sospecha de irregularidades. Asimismo, la OSCE, aunque sostiene que las elecciones sí han sido competitivas, ha apuntado a una ventaja injustificada a favor de Erdogan.
Durante la segunda vuelta, Kilicdaroglu careció de una estrategia eficaz, cimentando la victoria de Erdogan.
Kilicdaroglu esperó cuatro días tras el fracaso de la primera vuelta, y recurrió a convertirse en un líder ultranacionalista opuesto a los refugiados. Sin embargo, pese a que el líder de la oposición endureció su discurso e incluso prometió enviar "a casa" a todos los refugiados sirios si llegaba al poder, Ogan, se alió con Erdogan, siendo una alianza clave que determinaría la victoria de Erdogan.
Este giro estratégico de Kilicdaroglu en la segunda vuelta, implicó una abstención clave en el sudeste de mayoría kurda. Se produjo un descenso significativo de la participación, de entre el 5 y el 8 por ciento.
Tras comprometerse a formar un nuevo gobierno con siete vicepresidentes, Kilicdaroglu no logró presentarse como un político capaz de abordar los acuciantes problemas de Turquía.
Resultados segunda vuelta de las Eleciones Presidenciales en Turquía de 2023. Fuente: https://www.theguardian.com/world/ng-interactive/2023/may/28/turkey-election-results-presidential-vote-round-two
Las elecciones del domingo, 28 de mayo en Turquía se saldaron con una nueva victoria del presidente Recep Tayyip Erdogan con el 52% de los votos, ganando la presidencia por otros cinco años.
Sin embargo, Erdogan se enfrenta a dos retos clave. Por una parte, Turquía podría enfrentarse a un nuevo colapso económico este mismo año, que volvería a disparar la inflación y causaría estragos en su balanza de pagos. Tras las elecciones la lira turca volvió a perder su valor frente al dólar estadounidense y el euro. Asimismo, el país ya sufrió un desplome histórico de su moneda a finales de 2021 y una inflación superior al 85% el año pasado.
Por otra parte, el próximo año, se celebrarán elecciones municipales, claves para Erdogan, En las principales ciudades, Estambul y Ankara, Erdogan tendrán que cambiar su política económica y monetaria y centrarse en reducir el coste de la vida y acelerar la repatriación de los solicitantes de asilo sirios.
En política internacional, el presidente turco priorizará reanudar la normalización regional y reparar las relaciones de Turquía con EE.UU. y la UE, y buscará una cooperación más estrecha con Rusia en varios ámbitos. Tanto los datos económicos, como la política exterior, y las próximas elecciones de 2024, marcarán los primeros años para Erdogan y el rumbo de Turquía.
Bibliografía recomendada:
1- Factbox: Turkey’s new government: Key figures in Erdogan’s Cabinet (2023) Reuters. Disponible en: https://www.reuters.com/world/middle-east/turkeys-new-government-key-figures-erdogans-cabinet-2023-06-03/
2- Gil Iglesias, D. (2023) Turquía: Cinco Años más de Erdogan, The Political Room. Disponible en: https://thepoliticalroom.com/turquia-cinco-anos-mas-de-erdogan/
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